Enésimo virus: me paso a Linux

He estado unos días con el ordenador kaputt porque me ha entrado el enésimo virus en el cacharro. Aparte de la pérdida de la información, lo que más me ha molestado ha (y es) el tiempo que me lleva ponerlo todo bien de nuevo.
Pero esta vez, he explotado. No del todo, pero he explotado. Estoy harto de antivirus, firewalls, anti-spyware, actualizaciones críticas, no-críticas, semicríticas y demás.
Todo ok, todo perfecto y aún así, para adentro. No puede ser.
Por eso, me he pasado a Linux. De momento, conservo los dos porque hay cosas que necesito para trabajar y en Linux, con máquina virtual o Wine no acaban de ir bien. Pero en el día a día, sin duda Linux.
No sé si es mejor, peor o regular. Me da igual. Pero no se puede seguir perdiendo hora tras hora delante de una pantalla arreglando desaguisados.
Después de instalar sopotocientas distribuciones (Ubuntu, Kubuntu, Mandriva, Fedora, Suse,...) me he quedado con esta última porque me parece la más cómoda.
La instalación, a pesar de la leyenda negra que tiene Linux, no puede ser más sencilla y rápida (ni la instalación de Windows es tan simple), pero con el manejo e instalación de programas aún ando algo despistado.
De todas formas, os recomiendo que le deis una oportunidad. Vale la pena intentar dar ese pasito adelante para olvidarse de esa pesadilla de virus y demás.